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El palito mágico

28 octubre 2009
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Mi padre, aunque abogado, era ingeniero en su corazón. Disfrutaba con los retos mecánicos, y era el rey del bricolaje de mercadillo. Un domingo con él por el rastro era una vorágine de compras aparentemente absurdas que después, al cabo de un tiempo variable, resultaban esenciales para resolver una avería en una cerradura, o la rotura de una cisterna. Pero había algo que no podía fallar: la herramienta adecuada a cada necesidad. Un alicate de 20 milímetros, con la punta fina y curva resultaba esencial para extraer y volver a colocar un muelle en un juguete roto, y ahorraba mucho tiempo y muchos esfuerzos, por lo que el dinero que pagabas por él estaba siempre bien invertido. El riesgo, evidentemente, el de reunir una inmensa colección de cosas de tamaño y forma variable que, aparentemente, tras su uso no servían para nada más…

fendu01

Vaya, pues resulta que en el pan pasa lo mismo. Intente hacer fendu con el mango de una pala pequeña de jardinería hace unos meses, y el resultado fue desastroso. Luego vino Iban a ponerme los dientes largos al enseñarnos los llonguets, maravillosos primos de este pan francés. Lo bonito fué que, hace un par de semanas unos ángeles de la guarda catalanes pasaron por mi casa y me dejaron, entre otras maravillas, un perfecto palito de madera, cuyo grosor y longitud se han demostrado perfectos para hacer el que, hasta la fecha, es mi pan más bonito. La receta es ésta, con pequeñas modificaciones (para traducción macarrónica-festiva, me silben por email).

fendu02

El secreto del moldeado del fendu está en el trabajo del palito. Tras hacer un batard con la masa fermentada, se coloca sobre una cama de harina abundante y, dejando la zona de sellado boca arriba, se aplasta con el palito generando una zona central casi plana que «estira» de dos subtorpedos laterales, que deben plegarse por dentro (contactando las dos caras enharinadas que quedaban boca abajo). En esta misma posición deben reposar las piezas para la fermentación secundaria, para luego darles la vuelta antes de introducirlas en el horno, donde se abren de una forma que no me atrevo a definir sin cometer una obscenidad. En cualquier caso, quedan preciosos. Os recomiendo encarecidamente la receta, al menos yo disfruté como un enano.

23 comentarios leave one →
  1. 29 octubre 2009 12:15 am

    Humm… la explicación me ha confundido un poco, pero viendo las fotos de WY me queda clarinete y, aunque no sé si lo haceis igual, te han quedado de ingeniero de corazón. ¿Qué masa era? ¿Blanca básica normalita? ¿Qué hiciste con ellos? ¿Te animas a hacerte unos en [h]arina el viernes? (Tengo mandil limpio bordao con tu nombre).

  2. Maria C. permalink*
    29 octubre 2009 12:23 am

    Gusete, son re-que-te-bonitos
    que tu eres mu modesto pa tus cosas
    Saludos

  3. idu permalink
    29 octubre 2009 1:04 am

    Me estais obsesionando con esto del pan, cada dia me poneis los dientes largos con un nuevo reto. Te han quedado super bonitos, y me ha encantado la tecnica

    • Gusete permalink*
      29 octubre 2009 9:57 am

      Aha, idu…ya te queda menos, entonces. Acabaremos montando una secta de panaderos artesanos zombies, que atacarán sin piedad las gasolineras con horno de baguettes 🙂

  4. Carmen permalink*
    29 octubre 2009 1:58 am

    ¡Geniales!! Me han encantado. Ya me habían llamado la atención en WY. Yo quiero un palitoooooo :))) Sí, si. Hazlos en Harina el viernes y que nos reserven unos cuantos para el sábado jijijiji

    Biquiños

    • Gusete permalink*
      29 octubre 2009 9:58 am

      Pal palito, ya sabes con quien hablar… Me temo que pedirán mas fariña 😀 Y el sábado, ya veremos lo que nos depara el destino qjniense

  5. 29 octubre 2009 11:40 am

    Cuánto de bonito por aquí siempre…y qué gusto da venir, y qué gente más maja 🙂
    Estos fendus son como pa’ sacar el chorizo de pamplona, la mantequilla e irse al Pagasarri en un instante (o asín, ya sé yo lo que me digo). Pues con palito o sin palito, debería Ud. recibir la Croix d’Honeur de la Légion des Fenduères (si algo así existiera).

    • 30 octubre 2009 10:06 am

      Bonito es verle a Ud. por aquí, divinidad panaria 😛
      El Pagasarri igual me pilla pelín retirao, pero vamos, que son de bocata brrrrutal, pesaban unos 300 g cada uno. Si los hago un día para excursionar, o bien pienso en el «para quien», o los hago de mitad de peso (Qj, como me dijiste que se llamaban, francesitas?)

  6. 29 octubre 2009 12:18 pm

    Carai, si que me ha costado que me admitiera el comentario :-(, a lo que vamos.

    Feliz que le gustara, pero que sepa, que al rodillo le ha de sumar sus manos, o si no ¡ya me dirá!, que por algo le llaman Lisensiado. Son PRECIOSOS, además del fendu, el color, la corteza con esas grietas, esta acomulando Vd. muchos 10 😉

    Una abraçada ben forta.

    • 30 octubre 2009 10:08 am

      Amiga, sin su concurso habría sido imposible… Y cuando me salgan unas buenas baguettes, también te las enseñaré (las baguettes :-P)

  7. 29 octubre 2009 12:31 pm

    ups! acumulando…mejor me hago un cafelito…

  8. 29 octubre 2009 2:38 pm

    Vuelvo a leer despues de unos dias en los que en lugar de amasar, he sido amasado: balneario…:)

    Rellenaba yo ahora mismo esos panes de unas cuantas cositas, que hoy no me toca comer por prisa y por purgarme de estos dias de vacaciones y excesos.Este fin de semana refresco masa y me pongo con alguna cosilla.

  9. 29 octubre 2009 5:22 pm

    Hola Gusete, hermosos tus panes, y siempre tus explicaciones me hacen sonreír por la picardía. En México existen las »teleras», que tambíen se hacen asi con un palito, lastimosamente hasta ahora no me han quedado perfectos como yo quisiera :), hace rato no lo intento de nuevo. Hoy me toca hacer »pan de muerto» para la familia, así que estaré metida unas buenas horas en la cocina. Saludos y felicitaciones por esos bellos panes.

    • 30 octubre 2009 10:11 am

      Ay, Gaby, te nos hiciste habitual, que alegría! Y las teleras son pancitos de masa blanca, o distintos? Qué bonita la costumbre del Pan de muerto. Un abrazo desde este lado del charco

  10. 29 octubre 2009 8:26 pm

    Gusete, te han quedado de libro!!!!
    Oye, y el palito ese, exactamente ¿como es? quiero decir de largo y tal…..

  11. Juanshu permalink
    29 octubre 2009 10:08 pm

    Cómo decimos por aquí:
    Kiyo, ke peazo pan ta’zalio, Guzete.
    Ke gashó.

    Lo quiero intentar, ya te comentaré.
    Zalú.

    Huanshu.

    • 30 octubre 2009 10:13 am

      En Cai dirían que este pan es un «bastinaso»… 😀 Si lo intentas cuéntamelo, me da cierto morbo lo de ver extenderse las ideas…

  12. Varo permalink
    29 octubre 2009 10:28 pm

    Uno de mis panes favoritos. Mis manos aún-todavía no me permiten hacer esas virguerias. Espero que con más maña que fuerza algún día me salga los fendús (ues)
    Preciosos. Piden embutido del bueno.

  13. Juanshu permalink
    30 octubre 2009 12:06 am

    Se me olvidaba decirte, que a este pan, en esta zona se le llama MOYETE FRANCES.
    Cómo no?.
    Zalú.

    • 30 octubre 2009 10:14 am

      Calla, calla, que tengo pendiente perfeccionar la receta der Moyete…ese lo repetiré hasta que me quede fetén, pero necesito pillar una harina más suavecica, que las recias castellanas que gasto por aquí son buenísimas para la hogaza, pero no tanto para el mollete :-/

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