Saltar al contenido

Rosca de nata

18 May 2012
by

Hay olores y sabores que te persiguen desde niña, el olor y sabor de esta receta me ha perseguido durante mucho tiempo, como ya he explicado muchas veces, la casa de mis padres está en un barrio donde las panaderías abundaban y en todas tenían esta rosca, pero la que a mi más me gustaba era la de la Sra. Emma. Esta panadería fue una de las que cerro después de la muerte de esta señora y con ella se esfumo este manjar.

Hablando con mi madre, empezamos a pensar quien podría recordar cómo se hacía esta rosca: recorrimos personal que trabajó en la panadería y no hubo suerte, pensamos en familiares que hubiese trabajado en la panadería o pudiese haber heredado la receta y después de varios intentos nos dieron la pista de que quizás un nieto de la Sra. Emma pudiese tenerla, pero… ahora vivía en Portugal, ¡vaya!

Mi madre es muy tenaz y gracias a su tenacidad de muchos meses consiguió, por fin, la receta que aquí os presento. Gracia mama, por no rendirte.

Para mi es un tesoro que guardo con mucho cariño, no sólo por lo rica que está esta rosca y por los recuerdos que me trae de mi niñez, también porque la Sra. Emma era una mujer extraordinaria y me complace enormemente tener una receta suya y que se pueda preservar en el tiempo algo de su saber.

Como podéis observar esta rosca de nata, no la lleva. Tengo una hipótesis: la nata se utilizaba  para hacer la manteca de vaca para las roscas de Pascua, que era muy apreciada y se pagaba muy bien, así que imagino que el recurso fue hacerla con la leche cortada con limón, obteniendo un excelente resultado.

Necesitamos:

¼ litros de leche cortada con limón

1 kilo de harina

1 kilo de azúcar (yo he usado azúcar de caña)

4 huevos

100 gramos de mantequilla derretida

2 cucharaditas de canela

50 grs. de masa madre de trigo al 100% de hidratación

un poquito de esencia de anís

1 cucharadita de bicarbonato

Se pone la masa madre con la leche cortada en un bol, se añade el azúcar, los huevos y se baten un poco hasta que estén bien integrados, se le añade la esencia de anís, la canela y la mantequilla derretida y poco a poco se le añade la harina, mezclada con el bicarbonato hasta obtener una masa pegajosa pero ligeramente consistente. Recuerdo, como siempre que es posible que, según el tipo de absorción de la harina, necesitaréis más o menos.

Se pone en la bandeja del horno una papel de hornear y se vuelca la masa sobre él. Hacer un agujero en la masa con una espátula para formar la rosca. La masa es bastante moldeable y se puede formar la rosca con la ayuda de la misma espátula.

Precalentar el horno a 200º y cocerla durante unos 35 ó 40 minutos. Pincharla con un palillo para comprobar que está cocida, dejar enfriar sobre rejilla.

Esta rosca tiene una textura crujiente y al hornearla el olor es increíble, la mezcla de la canela, el anís, el azúcar de caña y mantequilla le da un sabor que deleitará cualquier paladar. 🙂

ACTUALIZACION  23/05/12

Recomendaros que hagáis la rosca más bajita y que cuando la saquéis del horno después de los 30 ó 35 minutos, puede parecer que necesita más tiempo, pero termina de hacerse con el propio calor, quedará más blandita y se conserva mucho mejor.  He tenido que hacer unas cuantas más, por lo mucho que han gustado  y eso es lo que he observado y quería compartirlo. :))

Un par de  fotos de cómo quedaría más bajita y menos tiempo de horneado. El color se vuelve más oscuro y resiste perfectamente durante mucho tiempo si la mantenemos en una caja de galletas.

 

 

11 comentarios leave one →
  1. Roser permalink
    19 May 2012 12:48 pm

    Vaya regalo que nos haces Carmen. Preciosa historia y receta.
    Besos

    • Carmen permalink*
      19 May 2012 11:21 pm

      Gracias Roser. Me alegro que te haya gustado. 🙂
      Besos

  2. 19 May 2012 1:56 pm

    Hola Carmen,
    Gracias por esta bella historia y por el tesón de tu madre que ha permitido que nos hagáis participes de algo maravilloso que ya no quedara en el olvido. Gracias a la Sra. Emma. Finalmente la receta la mando su nieto?, en principio me ha parecido entender que fue el, pero después me ha surgido la duda.
    Gracias Carmen y Bss

    • Carmen permalink*
      19 May 2012 11:26 pm

      Gracias Juanjo, Sí, la receta la tenía su nieto y supongo que su padre le dio bastante la lata para que se la enviase y acabar con la insistencia de mi madre. He de decir que mi madre tiene buena relación con esta familia y se pudo permitir insistir hasta conseguir la receta.
      Besos

  3. JoseRa permalink
    19 May 2012 3:22 pm

    Gran labor, esa de recuperar recetas tradicionales. Y contrariamente a lo que a veces pensamos, no simpre contundentes, con muchas grasas «malas». Rosca de nata sin nata. Muy bueno. Una pregunta: lo de la leche cortada con limón… ¿unas pistas para no liarla?

    • Carmen permalink*
      19 May 2012 11:30 pm

      Hola JoseRa, Pues sí, a mi me encanta recuperar esos sabores de mi infancia y no perder esa sabiduría que se traspasaba oralmente y por eso mismo se perdían si alguien no las recuperaba.

      La leche yo la corte echándole zumo de limón hasta que se corto la leche; se forman grumitos. Utilice una leche fresca gallega. Supongo que es esto lo que preguntabas 🙂

  4. cecília permalink
    19 May 2012 5:43 pm

    Maravillosa historia!
    Que importante es que no se pierdan estas cosas que tenemos gravadas en nuestro interior desde pequeños.
    Y que bonita manera de seguir recordando a la Sra. Emma. Vamos, que allá donde esté, debe estar encantada que alguien continúe con su Rosca de Nata.
    Gracias por compartirla.
    Un abrazo

    • Carmen permalink*
      19 May 2012 11:36 pm

      Gracias Cecilia, totalmente de acuerdo con lo que expresas y sí, espero que esté donde esté, tenga una sonrisa por esto, porque yo tengo muchos recuerdos de esta mujer. Tenía una sensibilidad, generosidad y honestidad, envidiables. 🙂

      Gracias a ti por tus palabras y tu comentario. Un beso

  5. 15 junio 2012 9:48 am

    Que rico y artesano! Tengo invidia sana, si veo como lo hacéis! En cuanto pueda quiero hacer mi propia pan!

    • Carmen permalink*
      20 junio 2012 10:49 pm

      Te animo a que hagas tu propio pan, seguro que no te arrepientes. Ya nos contarás 🙂

      Un saludo,

  6. Tresco permalink
    19 enero 2013 5:03 pm

    Hola Carmen,

    Hay un bollo en Valencia de Alcántara que me vuelve loco: el bollo de Semana Santa. Es una especie de brioche de anís redonda y basta, pero con un sabor que me apasiona.
    Por motivos económicos me vi obligado hace unos años a irme a vivir al extranjero, con lo que mis visitas a Valencia de Alcántara prácticamente han cesado (mi familia está afincada en su práctica totalidad en Madrid, y las pocas veces que la visito es ahí donde voy) El año pasado tuve tal ataque de nostalgia, que recluté a todas mis tías para que me consiguieran la receta. Desgraciadamente, no obtuve la receta que posee «el secreto» pero al menos sirve, al menos, para calmar mis ansias. Esta entrada en tu blog me ha recordado a aquella anécdota y me apetecía compartirla. Sólo quiero añadir que me encanta tu blog y lo visito con asiduidad.

Replica a cecília Cancelar la respuesta